Arica es una ciudad donde el fervor religioso es mayor, por ello los
feligreses al llegar a esta ciudad no dejan de pasar por la Catedral de San
Marcos, majestuosa por su arquitectura y su historia. Esta Iglesia fue
construida bajo los cimiento de la que fue la Iglesia Matriz de Arica,
edificada en el virreinato el año de 1640, y que tras el terremoto que azotara
a la ciudad en el año de 1864 dejara de existir, quedando solo escombros.
La Iglesia Matriz fue construida gracias al aporte del portugués Baltasar
Farfullares, quien fue dueño de las minas de plata de Huantaja. Su
construcción se llevó a cabo con materiales traídos desde Lima, como es
el caso de la cal, y desde Guayaquil fue traída la madera.
Para la construcción de la actual Catedral, esta fue encargada por el
presidente peruano Balta a los talleres de Gustavo Eiffiel, el cual accedió y
ya en julio de 1876 se inaugura con una misa.
En 1880 es ocupada la ciudad de Arica por el ejército chileno, aún así la
parroquia siguió dependiendo de la diócesis de Arequipa por intervención de la
Santa Sede, ya para el siglo XX deja de depender de Arequipa. Por lo cual el 27
de febrero de 1910 el intendente de Arica, Máximo Lira, decreta la expulsión de
Juan Vitalicio Berroa y de su auxiliar Juan Gualberto Guevara, debido a los
constantes ardores de nacionalismo que se generaba en esta ciudad hacia el Perú
y siendo ellos peruanos son remplazados por capellanes militares chilenos.
Este monumento obtiene el rango de Catedral el año de 1959 al crearse el
Obispado de Arica. Fue el 4 de octubre de 1984, donde la Catedral de San Marcos,
es declarada Monumento Nacional de Chile, en la categoría de Monumento
Histórico a través del decreto Nº 602. En sus interiores se expone el Monumento
Histórico de la Campaña de Arica.
Esta Catedral está inspirada en un estilo gótico, ya que su estructura es
completamente metálica, a excepción de las dos puertas que son de madera,
tienen vigas y pilares que se unen en arcos ojivales. Sus vitrales de colores y
la forma en que su torre se ve elevada al cielo, dan una sensación de mágica
belleza.
Dentro de sus interiores podemos encontrar a un antiguo Cristo del siglo
XII. Su santo patrono es el apóstol San Marcos y es celebrado cada 25 de abril,
fecha de la fundación española a la ciudad; en esta celebración podemos
observar la ferviente devoción tras las constantes peregrinaciones de sus
feligreses.
